Suele pasar. Nos atiborramos de grasas y azúcares y, cuando nos queremos dar cuenta, nos hemos sobrepasado tanto que hay que rebajar rápidamente. Y es que a la vuelta de la esquina se encuentra ese evento que consideramos importante y en el que queremos lucir bien: la boda de una amiga, las vacaciones de verano, etc.
Hay formas de perder peso en un mes de forma efectiva, sin que sobrevenga el temible efecto rebote y poniéndole al asunto mucho de constancia, tenacidad y paciencia. Y, lo que en ocasiones es lo más difícil: superar la tentación.
Consejos para perder peso en un mes
El reto que tienes delante de ti no es nada fácil, hay que reconocerlo. Pero, una vez que te veas a la línea ganarás tanto en seguridad en ti misma/o, estarás tan a gusto con tu cuerpo que todo el esfuerzo habrá merecido la pena. Sigue nuestros consejos para perder peso en un mes de forma efectiva y todo irá bien.
Adiós al azúcar
Es absolutamente contraproducente además de muy poco sana. Hay edulcorantes naturales como la miel, el sirope de ágave o la stevia que proporcionarán a tu cuerpo la energía que necesitas y a tu paladar el punto dulce justo, sin perjudicar a tu salud ni a tu reto. Desecha los helados, galletas, zumos industriales, cócteles…
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Bye-bye harinas
Y en ella incluimos no solamente aquello con lo que rebozas el pescado, sino también la que se contiene en pastas o en el arroz. Adiós también a los pasteles o a las empanadas y súmate a los alimentos integrales y enriquecidos en fibra.
Regula el consumo de aceite
Acostúmbrate a cocinar con lo justo de aceite en la plancha y a usar poco para aliñar tus ensaladas. El aceite es muy graso, sobre todo el de uso industrial, por lo que puede influir, además de en tu aspecto, en tu salud. ¡Ni que decir que tiene que nada de fritos! La plancha, la vaporera, el cazo con agua para hervir o el horno deberán estar a la mano en tu cocina.
Reduce la ingesta de carnes procesadas
El informe de la Organización Mundial de la Salud generó mucha polémica, pero lo único que venía a decir es que no puedes atiborrarte de carne roja o salchichas, porque aumentan el riesgo de cáncer. Ponte tú mismo/a ante los fogones.
Serás capaz de extraer todo el sabor y los nutrientes necesarios. Cocinar tú es tener la garantía de que comes lo mejor y lo más sano, así que evita también comer fuera de casa demasiado.
Evita pasar hambre
No te vayas al trabajo sin desayunar, ni te saltes la media mañana para llegar a casa con un hambre voraz que pueda hacer que te comas una vaca rellana de pajaritos.
Desayuna, haz la media-mañana, almuerza, merienda y cena. Es decir, haz 5 comidas al día como mínimo, para asegurarte de que tu cuerpo tiene todo lo que necesita. Las comidas principales podrán ser más ligeras.
Las proteínas, tus aliadas
Ayudan a la creación de músculo y donde hay músculo no hay grasa. Es decir, hace que tu cuerpo sea, como se suele decir «pura fibra».
Claro está que no hablamos de embutidos, sino de carnes blancas (como el pollo, el cerdo o el pavo) que deberás comer a la plancha.
Si estás siguiendo una dieta vegetariana por principios, tendrás tu aporte en el huevo, que puedes consumir en su versión ecológica, o en el queso. Si eres vegano/a, las legumbres, los cereales o los frutos secos no pueden faltar en tus platos. O incluso el jengibre
Decántate por las grasas saludables
Existen y, además, son muy necesarias para el buen funcionamiento del organismo y para perder peso. No te confundas con esas grasas malas que nada aportan, hablamos de las de origen vegetal, en su mayoría.
Los frutos secos, los huevos, frutas como el agucate o el aceite de oliva se cuentan entre las grasas útiles para el organismo.
No olvides tampoco realizar ejercicio físico diario y… ¡desechar las excusas!
