Los días de zumo como cura de adelgazamiento a corto plazo gozan de gran predilección. Durante uno, dos o incluso tres días lo único que hay para beber son zumos recién exprimidos.
Con ello se estimula la digestión, con el rápido paso a través del intestino y la frecuencia de las defecaciones se eliminan del tracto gastrointestinal numerosas sustancias tóxicas y perjudiciales y se restaura el nivel de la flora intestinal.
El aporte energético es escaso y se sitúa unas 1.000 calorías por debajo del consumo real. Esto tiene la desventaja de que la cura no puede mantenerse por lo general durante más de tres días.
La ventaja es que dos o tres días a base de zumos proporcionan una pérdida de peso máxima. Se puede adelgazar hasta un kilo diario.
Cómo actúan los días de zumo
Además de muchas vitaminas y minerales, la fruta fresca contiene gran cantidad de hidratos de carbono en su forma más sencilla, el azúcar natural (fructosa), que se digiere con gran rapidez y se transforma en glucosa, es decir, en la fuente de energía que nuestro organismo necesita urgentemente.
En 100 g de manzanas hay 14 g de hidratos de carbono, en 100 g de plátanos 20 g y en 100 g de ciruelas hasta 45 g. Sin embargo, nuestro cuerpo sólo puede almacenar una cantidad pequeña de hidratos de carbono, más o menos la mitad de las necesidades diarias. Por lo tanto, durante los días de zumo se consumen las reservas de glucógeno.
Esto va acompañado de una rápida pérdida de peso porque con el glucógeno se libera también agua. En consecuencia, con el consumo exclusivo de zumo apenas es posible satisfacer las necesidades diarias de 2.000 a 2.400 calorías, porque aunque se beban cinco o más litros de zumo diarios no todos los hidratos de carbono pueden absorberse. Por tanto, los días de zumo significan siempre un aporte hipocalórico y con ello un adelgazamiento más o menos eficaz.
Componentes
Con la variedad de frutas que hoy disponemos, los días de zumo pueden programarse con gran pluralidad. En los mercados y supermercados existe una amplia selección de frutos exóticos que de este modo se pueden conocer.
Los frutos amarillos tales como albaricoques o melones cantalupos contienen mucha carotina, que en nuestro organismo se transforma en vitamina A.
La importante vitamina C está contenida en toda la fruta, que llevan además gran cantidad de fibra, en particular en las manzanas y los plátanos.
¿Qué se puede comer?
Calorías:
Sin limitación.
Proporción de nutrientes:
95 % hidratos de carbono, 5 % proteínas.
No se puede tomar nada más que zumos recién preparados de la máxima variedad posible de futas.
La fruta madura, gracias a su apetitoso color y naturalmente su sabor, es más adecuada para esta cura que la inmadura. Deberá utilizarse sólo fruta fresca y no en conserva, ya sea en lata, en frasco o ultracongelada. El zumo debe ser siempre recién exprimido y se beberá de inmediato pues al guardarlo (aunque sea en la nevera) se pierden muchas vitaminas importantes.
Ventajas
El zumo de la fruta fresca sabe muy bien y ofrece una variedad enorme de posibilidades gustativas. El recién preparado contiene muchas vitaminas y minerales, además de un mínimo de hidratos de carbono, por lo que es posible alimentarse exclusivamente con fruta durante dos o tres días.
Desventajas
Aunque la fruta contiene proteínas, la cantidad no es suficiente. Puede producirse entonces un rechazo, sobre todo porque pronto la sensación de hambre se despierta pidiendo alimentos sólidos.
Los días de zumos pueden conducir a un lavado del contenido intestinal y, con ello, fácilmente a flatulencias y diarrea. También es posible la aparición de mal aliento durante estos días.
Intolerancias/riesgos
En las personas con altas necesidades de proteínas a causa del estrés pueden aparecer síntomas carenciales tales como fatiga, estados de agotamiento, falta de impulso, falta de concentración o nerviosismo.
Debido al déficit de hidratos de carbono, las mujeres y los hombres que desarrollan una actividad física experimentan a veces un descenso de presión. Se producen en ocasiones mareos y tendencia al colapso.
Resultado
Los días de zumo son ideales para desprenderse en muy poco tiempo de un par de kilos ganados con rapidez. El zumo recién preparado resuelve las obstrucciones intestinales y el estreñimiento, estimulando también la actividad de los riñones.
Puesto que ningún otro alimento ofrece tantas posibilidades gustativas distintas como la fruta, los días de zumo pueden ser muy variados.
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