El rostro es una de las partes del cuerpo en donde más se aprecia el paso del tiempo. Todo comienza con un signo: esas tÃmidas patas de gallo que afloran al lado de los ojos y que nos indican que ha llegado la hora de echar un ojo a las recomendaciones de cremas antiedad de las usuarias habituales.
No siempre las más caras son las mejores, pero sà es cierto que muchas veces merece la pena apostar por cremas antiarrugas cuya firma esté respaldada por un laboratorio que siempre se encuentre buscando la fórmula más completa de la mano de la innovación tecnológica.
Por lo general se emplean términos muy especÃficos para indicar todo lo que ese producto cosmético puede hacer por la piel del rostro para alisar las arruguitas y hacer que nuestra piel se vea más joven, pero si no estamos familiarizados con ellos, es posible que no sepamos de qué hablan.
El ácido hialurónico
Es una sustancia que se encuentra de manera natural en los tejidos del cuerpo humano, como la epidermis y está encargada de retener el agua, que debido al envejecimiento progresivo, también disminuye.
Al perder la hidratación es cuando entran en escena las arrugas y los surcos alrededor de los labios, de los ojos y en la frente.
Las cremas antienvejecimiento con ácido hialurónico lo que hacen es rellenar las arrugas para que la piel se vea más tersa y elástica, suavizando las lÃneas de expresión.
Las ceramidas
Otro ingrediente que resuena con bastante asiduidad son las ceramidas, de la familia de los lÃpidos, al igual que los ácidos grasos o el colesterol, pero presentes en el cabello, la piel y las uñas.
Las ceramidas actúan en nuestra piel como una barrera frente a la deshidratación, evitando que la piel se seque y se irrite.
El retinol
El retinol, también conocido como retinol A, es uno de los compuestos orgánicos nutricionales presentes en la vitamina A.
Es seguramente uno de los ingredientes antiedad más apreciados por su función, que no es ni más ni menos que la de estimular la producción natural de ácido hialurónico y de colágeno, una proteÃna que da firmeza y elasticidad a la piel. Las cremas con retinol son, por tanto, de las más vendidas y quienes las utilizan aseguran que los buenos resultados se aprecian en muy poco tiempo, especialmente en las pieles delicadas.
La vitamina C
La vitamina C está llena de beneficios para nuestra piel, por lo que muchos dermatólogos ven en ella un aliado imprescindible para su cuidado.
La vitamina C funciona como antioxidante, bloqueando la acción de los radicales libres, que también contribuyen al envejecimiento prematuro de la piel, acelerando la aparición de las arrugas.
Al utilizar una crema con vitamina C, estaremos consiguiendo una piel mucho más luminosa y llena de energÃa, pero este componente también tiene otras propiedades fantásticas para la piel: es reafirmante, aumenta la sÃntesis de colágeno y además tiene un efecto aclarante de la piel, lo que ayuda a disimular las manchas que afean el rostro.