Muchas personas están dispuestas a comprometerse con su salud y a seguir una dieta sana y equilibrada que potencia las defensas y proporcione al organismo los nutrientes imprescindibles. El problema surge cuando no tenemos claro qué significa exactamente una dieta sana y equilibrada.
Dieta de Lácteos y Vegetales
Desayuno: un vaso de leche o pieza de fruta o un yogur.
Almuerzo: tres o cuatro piezas de fruta.
Merienda: como el desayuno.
Cena: tres o cuatro piezas de fruta.
Cuando se habla de «pieza de fruta» entendemos el tamaño normal de una manzana. Tratándose de melón o sandía, una pieza de fruta es una tajada. Y cuando se trata de fruta menuda (fresas, cerezas, uvas), se entiende por pieza de fruta una taza llena. No tomar ningún otro alimento.
Debe ingerir en las 24 horas unos 6 vasos de agua u otros líquidos sin calorías, tales como Tab, bitter, tónicas, etc.
A los refrescos deberá dejarles escapar un poco el gas. Y debe igualmente tomarlo todo más bien frío; aunque si siente necesidad de tomar algo caliente, puede tomar café, té o manzanilla cuantas veces quiera, pero sin azúcar (usar sacarina).
En los dos o tres primeros días puede notar molestias o dolor de estómago; es debido a que todo lo que toma es dulce y frío, y el estómago necesita algo salado y caliente. Puede solucionarlo tomando un consomé de ave cuando note dichas molestias.
También en los primeros días puede notar sensación de hambre e intranquilidad, lo que puede aliviar tomando algún refresco o bebida fresca, o simplemente agua. Esta dieta es muy depurativa (bajando todos los niveles altos de colesterol, ácido úrico, glucosa, etc.), y es totalmente inocua.
Dieta a Base de Proteínas
Desayuno:
Un café o té con sacarina.
Un trozo de queso fresco de unos 50-100 g, o una loncha de jamón de york, o un huevo duro o pasado por agua.
Almuerzo:
Una de las tres cosas siguientes:
Un filete de cualquier tipo de carne, a la plancha, de unos 150 g como máximo, con poco aceite (o mantequilla) y poca sal (o limón).
Una tortilla de dos huevos, o dos huevos duros.
Unos 150 g de cualquier tipo de pescado, a la plancha o hervido, con poco aceite y poca sal (o limón).
Un consomé o caldo de ave (sin fideos u otra pasta) o un yogur.
Cena:
Un consomé o caldo de ave o un yogur.
Una loncha de jamón de york, o 3-4 albóndigas de carne o una hamburguesa, o un trozo de queso fresco de unos 50- 100 g.
Alimentos prohibidos:
Todas las frutas.
Pan, dulces, leche y patatas.
Bebidas muy gaseosas y/o azucaradas.
Condimentos:
Poco aceite, poca sal y poco picante.
Limón, mantequilla, ajo, perejil.
Mayonesa o kétchup (una cucharada en almuerzo). a la que los alimentos pasan por el intestino delgado, serán más o menos absorbidos, con lo que si la velocidad de tránsito es muy lenta, la absorción de los alimentos ingeridos es entonces muy completa y, lógicamente, el aporte calórico de lo ingerido será mayor.