Casi todos los días aparecen nuevos «métodos mágicos» para adelgazar a base de pastillas peligrosas. Pero, lamentablemente, se trata de anorexígenos, diuréticos y hormonas tiroideas que forman parte de una tríada bien conocida y muy empleada que provoca «adelgazamientos artificiales» y desequilibrios metabólicos peligrosos.
Metodos para Adelgazar No Recomendados
Anfetaminas
Su acción anorexígena es paralela e inseparable a la acción estimulante; no tienen ningún efecto lipolítico; provocan efecto «rebote» y ninguna de ellas ha demostrado ser útil en el tratamiento de la obesidad. Además, pueden llegar a originar complicaciones neurológicas, cardiovasculares y psicológicas (debido a su adicción producen dependencia física y psicológica).
Diuréticos
A pesar de que no tienen ningún efecto sobre la grasa, siguen siendo utilizados con frecuencia en el tratamiento de la obesidad. Muchos obesos piensan que están gordos porque retienen mucho líquido, y utilizan diuréticos.
Cuando utilizamos diuréticos, estamos eliminando agua y sales (potasio, magnesio, etc.), nunca grasa. Por tanto, las pérdidas de peso son siempre ficticias, y además, provocan un efecto rebote que da lugar a una mayor retención de líquidos. Por eso, si existe un problema de «retención de líquidos» se deben seguir con atención las normas que se indican en el apartado «Reeducación del riñón»
Sobre las Hormonas
Numerosos preparados hormonales han sido propuestos para el tratamiento de la obesidad, pero ninguno de ellos se ha revelado eficaz. Este es el caso de las hormonas tiroideas y gonadotropinas. Por el contrario, su efecto farmacológico conlleva alteraciones endocrinas importantes.
Selectores dietéticos
Son fármacos de última generación, que nos abren una esperanza en la constante lucha contra la obesidad.
El más importante es la dextrofenfluoramina, que actúa haciendo que el cuerpo responda de forma más eficaz a la hormona cerebral que suprime el apetito (serotonina); y además de regular el apetito, tiene una importante acción metabólica (ayuda a extraer la grasa de la célula). Apenas tiene efectos secundarios y su tolerancia es bastante buena.
Endostatina
Es un fármaco que puede ofrecer grandes expectativas en la lucha contra la obesidad. De momento, está en período de experimentación.
Vemos cómo la obesidad, al igual que la mayoría de los problemas humanos, se debe resolver paulatinamente, pues no es pensable una solución inmediata. Como suelen decir los tibetanos, es mucho más fácil subir una vez en la vida al Tibet que encender diariamente una lamparilla a los dioses.
Pero la obesidad, insistamos una vez más en ello, no es sólo un problema meramente estético, sino que incide, y además de manera importante, en la salud general, acortando incluso los días de vida.
Una figura estilizada, una buena salud, nos da la necesaria prestancia como para triunfar en una sociedad que se preocupa mucho porque los hombres que toman las decisiones, que inician negocios, los que en suma tienen en sus manos las iniciativas, se encuentren dentro de los patrones generalmente aceptados y admirados.
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