La vitamina A es liposoluble. Necesita grasas lo mismo que minerales para ser debidamente absorbida por el tubo digestivo.
Puede ser almacenada en nuestro cuerpo y no necesita ser repuesta cada día.
Se presenta en dos formas: Vitamina A preformada, llamada retinol (hallada sólo en alimentos de origen animal), y provitamina A, conocida como caroteno (proporcionada por alimentos tanto de origen vegetal como de origen animal).
La vitamina A se mide en Ul (Unidades Internacionales), RE (Retinol Equivalentes) y USP (United States Pharmacopea).
10.000 Ul diarias es la dosis diaria que necesita el hombre adulto, con el consiguiente incremento cuando el peso del cuerpo es muy elevado.
Las sustancias naturales de la vitamina A
Como las vitaminas son sustancias naturales halladas en los alimentos, los suplementos que usted toma sean cápsulas, tabletas, polvos o líquidos también proceden de los alimentos. A pesar de que muchas vitaminas pueden ser sintetizadas, otras son extraídas de las fuentes naturales básicas.
Por ejemplo: La vitamina A usualmente proviene del aceite de hígado de pescado. Las vitaminas del complejo B provienen de la levadura o del hígado. La vitamina C es mejor cuando es extraída de los escaramujos o bayas de la rosa silvestre. Y la vitamina E es generalmente extraída de los granos de soja, germen de trigo, o maíz.
Qué puede hacer por nosotros
Neutralizar la ceguera nocturna y ayudar en el tratamiento de muchos desórdenes oculares. Permitir la formación de la púrpura visual en el ojo.
Proporcionar resistencia a la infecciones respiratorias.
Acortar la duración de las enfermedades.
Mantener en buen estado funcional los tegumentos y las mucosas.
Promover el crecimiento, huesos fuertes, piel, cabello, dientes y encías saludables.
Ayudar en el tratamiento del acné, impétigo, forúnculos y úlceras abiertas cuando es aplicada externamente.
Ayudar en el tratamiento del enfisema y del hipertiroidismo.
Enfermedades por carencia
- La privación de vitamina A da como resultado las siguientes manifestaciones:
- Hemeralopatía o falta de agudeza visual en la penumbra o en la oscuridad en personas aparentemente sanas.
- Xeroftalmía. En esta afección la conjuntiva pierde el brillo, luego se hace opaca y finalmente se producen ulceraciones en la córnea.
- Lesiones cutáneas, sequedad de la piel y de las mucosas.
- Trastornos digestivos debidos a la ausencia de ácido clorhídrico en el jugo gástrico; diarreas.
Las mejores fuentes naturales
Aceite de hígado de pescado, zanahorias, perejil, diente de león, espinacas, vegetales verdes, frutas, leche y sus derivados, huevos.
Suplementos vitaminados
Generalmente se presentan en dos formas, una derivada del aceite de hígado de pescado natural y otra dispersable en agua. La dispersable en agua es acetato o palmitato y se recomienda para las personas que no toleran las grasas, particularmente a los que padecen de acné.
La vitamina A ácida (retina A) es a veces prescrita para el acné, pero sólo se debe tomar bajo prescripción facultativa. 10.000 a 25.000 Ul son las más comunes dosis diarias.
Toxicidad
Más de 100.000 Ul diarias pueden producir efectos tóxicos en adultos, si se toman durante varios meses.
Más de 18.500 Ul diarias producen efectos tóxicos en los niños.
Los síntomas de la intoxicación son: caída del cabello, náuseas, vómitos, diarrea, piel escamosa. visión borrosa, sarpullido, dolor en los huesos, menstruaciones irregulares, fatiga, dolor de cabeza y engrosamiento del hígado.
Enemigos
Acidos grasos poliinsaturados con caroteno trabajan contra la vitamina A a menos que estén presentes antioxidantes.
Advertencias
Usted necesita al menos 10.000 Ul de vitamina A si toma más de 400 Ul de vitamina E diarias.
Si su dieta semanal incluye importantes cantidades de hígado, zanahorias, espinacas, patatas, ensaladas, frutas, leche, queso, yogur, no le hace falta ningún suplemento de vitamina A.
